Pauta Montessori Vs Guía-Pauta Lamela

Todos los años cuando comienza el
curso vendemos una cantidad importante de cuadernos Lamela o Guía-pauta, para
niños que comienzan su aprendizaje en el mundo de la escritura. Este tipo de
cuadricula se ha ido implantando a lo largo de los años en el sistema educativo
como un elemento pedagógico inmejorable. Pues bien, desde La Librería de mi
Barrio, nos atrevemos a desmentir este mito que se ha ido expandiendo como si
de un milagro se tratará. La complejidad Visual de la presencia de múltiples
líneas y cuadros puede resultar muy abrumador para los niños que están
comenzado a escribir ya que todavía están desarrollando sus habilidades motoras
finas y percepción espacial. Esta complejidad puede generar confusión y afectar
a la claridad de la formación en las letras. Por otro lado, vamos a añadir que
este tipo de cuadricula imponen una rigidez en la escritura, que limita la
fluidez y naturalidad, afectando a la naturalidad la motivación y la
creatividad a la hora de escribir.
La Editorial GEU, en su web apoya
nuestra teoría comentando que el rayado Montessori «permite el aprendizaje
de la escritura trabajando con una pauta principal», lo que facilita a los
niños comprender hasta dónde deben extender las letras en sus trazos
ascendentes y descendentes.
Además, el sitio
Materialescolar.es señala que las cuadrículas pautadas, aunque similares al
rayado Montessori, «se diferencian de este por el hecho de tener cuadrícula»,
lo que puede añadir complejidad innecesaria en los primeros años de
aprendizaje.
En conclusión la Pauta
Montessori, o pauta simple es un enfoque mucho más simplificado y efectivo,
inspirado en un método educativo desarrollado por María Montessori, ofreciendo
una alternativa más adecuada para los primeros pasos en la escritura, ya que es
mucho más sencillo y claro. Una pauta principal con líneas paralelas superiores
e inferiores que guían a los niños en la extensión correcta de las letras. Esta
simplicidad reduce la sobrecarga visual y permite que los pequeños se
concentren en la forma y el trazo de cada letra. Además proporciona un
desarrollo de la escritura más autónoma, aportando una confianza e interés por
la escritura. Si lo que vamos a trabajar son números, recomendamos una
cuadricula única sin pauta, de 6 mm como mínimo, para desarrollar cada número
en un cuadro, de esta forma obtendremos número ordenados. Os dejamos una
muestra.